25/8/10

Lo que queda del verano

Este verano ha sido muy especial. Por una parte, la tranquilidad de haber terminado el proceso de idoneidad y la confirmacion no-oficial de que nuestro informe será positivo (a partir de octubre en lista de espera, o al menos eso espero).
El dejar este tema zanjado ha hecho que nos relajemos mucho y que hayamos tomado la decisión de disfrutar todo lo que podamos mientras seamos sólo 2.
Nos hemos ido de viaje, en tren, a Polonia. Dani hizo un blog donde ha contado qué nos ha pasado día a día. La dirección es apoloniaentren.blogspot.com y en él se narra de manera pormenorizada todo los detalles.
Ha sido toda una experiencia. Coger un tren con destino Barcelona y de ahí a la aventura hasta llegar a Polonia ha sido muy divertido y estresante. Hay un buen truco... dormir todo lo que se pueda en el tren. En total, en 14 días hemos cogido 18 trenes y estado en 5 países diferentes. Salir de casa hace que todo se vea... diferente. Valoras más lo que tienes. Por ejemplo, yo que odio el calor del verano y me paso el verano metida en casa con el aire acondicionado, lloraba de emoción pensando en el calor que tenía que hacer en España, porque hemos estado en el extranjero con 12 grados de temperatura pero con vestimenta de turista y chancletas.
Ahora, vuelta a la rutina poco a poco. Dani ya trabajando, mi madre recién operada del menisco, y yo cuidando de Norah por las mañanas. La semana que viene, vuelta al curro, a ver a mis "chicos" y ver que les hago después de las vacaciones.


Dani y el tren ruso que nos llevó a Polonia